LA CAJA Y LA ELECCIÓN DEL CANDIDATO 2018

En la mitología griega, la caja hermética que Zeus obsequio a Pandora para ser entregada a Prometeo, su prometido, traía en sí la esperanza o la desdicha de la humanidad.

Se habla en los discursos y se describe en los análisis ¿cuál podría ser el perfil o el candidato idóneo de los partidos postulantes? Para ser competitivo y ganar la elección presidencial.

El ciudadano, el que vota, por el que se gastan miles de millones de pesos, para atraer su atención y favorecer a uno de ellos, es el menos indicado para hacer ganar al “favorito” de los intereses.

Cuando Prometeo es liberado por Heracles, Esquilo pone en sus labios: Sí… yo he liberado a los hombres de la obsesión de la muerte…, he instalado en ellos las ciegas esperanzas… Les he regalado el fuego… De él aprenderán artes innumerables.

No está en el perfil de los intereses seguir gobernado y administrando el país. Está en el ciudadano que acudirá a votar para aprovechar la política que hace y mejorar con ella.

La inteligencia, más que la sabiduría deberá estar, no en aquel que se lleve la mejor impresión, sino de aquel que distinga y ponga e México en el lugar que debe ya desempeñar.

El líder no nace, sino que se hace con base a lo que hace y dice.

El próximo presidente de la nación, debe transitar del país del cautiverio a la liberación, ya no para poner la esperanza como último refugio, sino para renacer y llegar a ser nosotros mismos.   

La esperanza no ésta en el prójimo, ni en el político, siempre ha estado en nuestro interior.